jueves, 16 de febrero de 2017

Orígenes del acto de filosofar : asombro, duda y situaciones limiteS



Se denomina saber al conocimiento acerca de una cuestión, problema, disciplina o ciencia, conocimiento que puede tomarse como una representación de la realidad objetiva. Así, saber sobre un determinado tema implica estar en posesión de una representación de la realidad que debería ser útil para la toma de decisiones en esta. En tanto y en cuento elsaber y sus alcances es un problema que data desde los albores de la humanidad, se han desarrollado numerosas escuelas de pensamiento que tratan de dar cuenta de este fenómeno de un modo satisfactorio. No obstante, la cuestión sigue desvelando a especialistas, quienes distan en ponerse de acuerdo en cómo se lleva a cabo esta particularidad propia del hombre.

La ciencia que se encarga del fenómeno de la captación de conocimiento por parte del hombre se denomina epistemología, y en la medida en que es una escisión de la filosofía, puede decirse que estuvo siempre presente en la cultura occidental. En efecto, la misma etimología de la palabra filosofía remite a la expresión “amor al conocimiento”. Así, los primeros filósofos se encargaron de intentar dar cuenta de cómo se da el proceso de conocimiento en el hombre, a veces llegando a conclusiones que a una mentalidad moderna puede representársele lejano. Por ejemplo Platón refiere a un mundo suprasensible representado por las ideas que daría cuenta de lo real y verdadero, siendo el mundo sensible una representación degradada de esa realidad; así puede verse en la “Alegoría de la caverna” en donde lo personajes solo pueden observar sombras proyectadas por el fuego de los verdaderos sucesos acaecidos.
 Paralelamente, Aristóteles refiere a una distinción entre substancias, esencias y accidentes para dar cuenta de los universales y los particulares, orientándose a una filosofía realista. Mucho más adelante en el tiempo, Hume hablaría de la imposibilidad de dar cuenta de un conocimiento acabado por considerar arbitrario establecer relaciones de causa y efecto entre eventos concomitantes. Kant tratará posteriormente en resolver esta problemática, estableciendo niveles en el aparato cognoscitivo del hombre, formados por varias instancias que pueden dividirse en un conocimiento sensorial que luego sería procesado por categorías mentales.
En la actualidad, los alcances del saber y sus límites están expresados en el método científico. Existieron muchas contramarchas en su definición, pero puede decirse que una explicación y aporte definitivo en la materia fuel el concepto de “paradigma”, como conjunto de consideraciones previas condicionadas social e históricamente cuando se hace ciencia; un cambio en este sentido daría cuenta de una “revolución científica”.


ESTRUCTURA DEL ARGUMENTO

El modelo argumentativo, la estructura del argumento o simplemente el modelo de Toulmin explica desde el punto de vista lógico la estructura o el esquema al cual responde un texto argumentativoStephen Toulmin afirmó que las argumentaciones cotidianas no siguen el clásico modelo riguroso del silogismo. Para él, en una argumentación directa, un sujeto argumentador presenta explícitamente una tesis u opinión y expone una serie de argumentos o razones lógicas que deben desembocar en unaconclusión que confirma la tesis propuesta.
                              


Toulmin (1958), y luego junto a Rieke Janik (1984), describe un modelo de argumento conformado por seis tipos de declaraciones:
  • La tesis, es el punto de vista que usted expone frente a un tema. Por ejemplo : "El auto se ve mejor de rojo que amarillo".
  • La evidencia son los datos o la información sobre los cuales se basa la conclusión. Es el sustento.
  • Las garantías justifican la relevancia de la evidencia sobre la conclusión, bajo la forma de reglas, principios, patrones, etc. Responde a la pregunta ¿Por qué?. Por ejemplo: "El auto se ve mejor de rojo que amarillo porque el rojo es de pasion"
  • El respaldo asegura que las garantías sean fidedignas y aplicables al contexto presente.
  • La reserva o Las Salvedades es una objeción, refutación o excepción a la tesis propuesta.
  • El calificativo modal o Matizacion especifica el grado de certeza de una aserción (tesis). Es la probabilidad o posibilidad, ya que una tesis debe de comprobarse.
  • El modelo propuesto por el británico Toulmin no contempla la argumentación como una forma de interacción humana. Esto significa que deja de lado procedimientos que otros teóricos consideran "argumentativos" por ejemplo, la persuasión

FALACIAS FORMALES E INFORMALES

La palabra falacia se deriva del verbo FALLARE que significa ENGAÑAR; por esta razón se emplea para designar los razonamientos engañosos.
Una falacia es un razonamiento no válido o incorrecto pero con apariencia de razonamiento correcto. Es un razonamiento engañoso o erróneo (falaz), pero que pretende ser convincente o persuasivo.
Muchos autores resaltan que un razonamiento falaz no necesariamente posee una conclusión falsa; así como un razonamiento correcto o válido no necesariamente tiene una conclusión verdadera.
Los razonamientos falaces no son "falaces" por llegar a una conclusión falsa, sino por un error en su procedimiento. Podría decirse que una falacia es un razonamiento en que la conclusión no se deriva estrictamente de las premisas, aunque parece hacerlo.
Ejemplos:

Pedro está enamorado, a Pedro le gusta Susana, por lo tanto, Pedro está enamorado de Carla.
Julio fue al Psiquiatra, a Julio le duele mucho la cabeza, por lo tanto, Julio está loco.
Tradicionalmente, las falacias son divididas en dos grandes grupos: ¨Formales¨ y ¨No Formales¨. El tema que será ondeado, será el de estas últimas.
Para hacer una pequeña referencia sobre las falacias formales, diremos que son aquéllas que están conectadas con esquemas de inferencias válidos, el error se distingue en la estructura ¨fomal¨

                             
          B. FALACIAS INFORMALES
Las falacias no formales son razonamientos en los cuales lo que aportan las premisas no es adecuado para justificar la conclusión a la que se quiere llegar. Se quiere convencer no aportando buenas razones sino apelando a elementos no pertinentes o, incluso, irracionales. Cuando las premisas son informaciones acertadas, lo son, en todo caso, por una conclusión diferente a la que se pretende.

  • 1. FALACIA AD HOMINEM (DIRIGIDO CONTRA EL HOMBRE)
Razonamiento que, en vez de presentar razones adecuadas para rebatir una determinada posición o conclusión, se ataca o desacredita la persona que la defiende.es un ataque al que argumenta y no al argumento.
Ejemplo: "Los ecologistas dicen que consumimos demasiado energía; pero no hagas caso porque los ecologistas siempre exageran".
  • 2. FALACIA AD BACULUM (SE APELA AL BASTÓN)
Razonamiento en el que para establecer una conclusión o posición no se aportan razones sino que se recorre a la amenaza, a la fuerza o al miedo. Es un argumento que permite vencer, pero no convencer. Ejemplo: "No vengas a trabajar a la tienda con éste piercing; recuerda que quién paga, manda".
  • 3. FALACIA AD VERECUNDIAM (SE APELA A LA AUTORIDAD)
Razonamiento o discurso en lo que se defiende una conclusión u opinión no aportando razones sino apelando a alguna autoridad, a la mayoría o a alguna costumbre. Ejemplo: "Según el alcalde, lo mejor para la salud de los ciudadanos es asfaltar todas las plazas de la ciudad".
  • 4. FALACIA AD POPULUM (DIRIGIDO AL PUEBLO PROVOCANDO EMOCIONES)
Razonamiento o discurso en el que se omiten las razones adecuadas y se exponen razones no vinculadas con la conclusión pero que se sabe serán aceptadas por el auditorio, despertando sentimientos y emociones. Es una argumentación demagógica o seductora.
Ejemplo: "Tenemos que prohibir que venga gente de fuera. ¿Qué harán nuestros hijos si los extranjeros los roban el trabajo y el pan?".
  • 5. FALACIA AD IGNORANTIAM (POR LA IGNORANCIA)
Razonamiento en el que se pretende defender la verdad (falsedad) de una afirmación por el hecho que no se puede demostrar lo contrario. Ejemplo: "Nadie puede probar que no haya una influencia de los astros en nuestra vida; por lo tanto, las predicciones de la astrología son verdaderas"."Nadie puede ver un átomo a simple vista, por ello, los átomos no existen".
  • 6. FALACIA POST HOC... (FALSA CAUSA)
Razonamiento que a partir de la coincidencia entre dos fenómenos se establece, sin suficiente base, una relación causal: el primero es la causa y el segundo, el efecto. Clásicamente era conocida con la expresión: "Post hoc, ergo propter hoc" (Después de esto, entonces por causa de esto).
Ejemplo: "El cáncer de pulmón se presenta (frecuentemente) en personas que fuman cigarrillos; por lo tanto, fumar cigarrillos es la causa de este cáncer".

CAVERNA DE PLATON

CAVERNA DE:
*IGNORANCIA
*MIEDO
*SOMBRAS
*VERGÜENZA



Por que es importante argumentar correctamente

Porque es la base racional de nuestros actos, de los motivos que los impulsan y explican, de nuestros proyectos y pensamientos. Caso contrario seguiríamos como "eternos" niños inmaduros, en el terreno del "capricho" y de las pulsiones irracionales.
En este punto es importante mencionar que hay argumentos que siendo incorrectos son psicológicamente persuasivos, de los cuales habrá que cuidarse porque nos pueden engañar, esto argumentos se denominan falacias. Una buena estrategia para distinguir un argumento falaz de un buen argumento sería que un buen argumento ofrece razones de tal forma que nosotros podamos formarnos una opinión propia, que podamos tomar postura frente a algún tema, mientras que la falacia busca persuadirnos a fin de que pensemos como la falacia misma lo indica, es decir que busca persuadirnos de que pensemos igual.
La argumentación abarca el razonamiento filosófico y científico que refuta los errores de otros y defiende la propia teoría. Reúne los procesos por los cuales son elaboradas y corroboradas teorías científicas, en el seno de las llamadas “ciencias duras”. La elaboración y aceptación de la valides de las teorías científicas pasa necesariamente por ciclos argumentativos.
La argumentación juega con un papel constitutivo indispensable, de acuerdo con los planteamientos de Chaim Perleman:

Es la teoría de las pruebas racionales no demostrativas
Es la lógica de las ciencias no demostrativas
Es el espacio en el cual se ponen en juego los valores sublimes o vulgares
Es el espacio en el que la razón demostrativa resulta impotentela 

argumentación es una  social, intelectual y verbal que sirve  justificar o refutar una opinión y que consiste en una constelación de enunciados dirigidos a obtener la aprobación de la 
argumentar forma parte de la   de cada ser humano. todos argumentamos para defender aseveraciones o  y nos enfrentamos con argumentos de otras personas. generalmente, podemos identificar claramente cuando estamos frente a un argumento. esto se debe a que hay ciertos rasgos peculiares de la argumentación que están presentes en cada discusión, y cuya presencia  una forma especial de usar el lenguaje: el uso argumentativo.                                                              en conclusion...    es importante porque las ideas son una  que existe o se forma en la mente, y la capacidad humana de contemplar ideas está asociada a la capacidad de raciocinio(argumento), autorreflexión, la creatividad y la habilidad de adquirir y aplicar el intelecto. por consiguiente utilizamos la argumentación para apoyar y darle forma a las ideas, ademas de persuadir y convencer a los demas de lo que pensamos o creemos.

El origen de la filosofía griega

El origen de la filosofía ha sido una cuestión controvertida a lo largo de la historia del pensamiento. Por lo general los filósofos griegos han considerado que la filosofía nace con Tales de Mileto allá por el siglo VII a. c., pero no se consideraba necesario explicar cómo se había producido ese surgimiento de una nueva forma de pensamiento. Sí parecía haber un común acuerdo en considerar la filosofía como la forma de pensamiento racional por excelencia, es decir, una forma de pensamiento que no recurre a la acción de elementos sobrenaturales para explicar la realidad y que rechaza el uso de una lógica ambivalente o contradictoria. Es a partir de la polémica que suscitan los filósofos alejandrinos durante el período helenístico cuando el origen de la filosofía comienza a convertirse en un problema. Y será a lo largo del siglo XX cuando se comiencen a encontrar respuestas explicativas de la aparición del fenómeno filosófico. Para nuestro objetivo nos bastará considerar las dos hipótesis más difundidas acerca del origen de la filosofía: aquella que sostiene el origen a partir de la filosofía oriental, y aquella que hace de la filosofía una creación original de los griegos, y que estudiaremos a continuación.

A) La hipótesis del origen oriental.

Los defensores de esta hipótesis mantienen que los griegos habrían copiado la filosofía oriental, por lo que la filosofía no podría considerarse una creación original del pueblo griego. Los primeros filósofos, sostiene esta hipótesis, habrían viajado a Egipto y Babilonia en donde habrían adquirido sus conocimientos matemáticos y astronómicos; lejos de ser los creadores de la filosofía habría sido unos meros transmisores del saber oriental que, en contacto con la civilización griega habría alcanzado un desarrollo superior al logrado en sus lugares de origen. Esta hipótesis la mantuvieron:
  • - Los filósofos alejandrinos. En polémica con las escuelas filosóficas griegas, y con el ánimo de desacreditarlas, los filósofos alejandrinos ponen en circulación la tesis del origen oriental de la filosofía.
  • - Los padres apologistas cristianos. Con intención polémica similar a la de los filósofos alejandrinos, los primeros padres apologistas del cristianismo, airean la hipótesis del origen oriental de la filosofía, hipótesis que posteriormente no será mantenida por la filosofía cristiana occidental.
La cuestión que se debate es si existe esa supuesta filosofía oriental. Si asimilamos la filosofía a un discurso racional entendido como la imposibilidad de recurrir a lo sobrenatural para explicar los fenómenos naturales, y al rechazo de la contradicción, resulta difícilmente sostenible la existencia de una filosofía oriental. La cuestión que se plantea, pues, es la de determinar si esa astronomía y esas matemáticas orientales eran o no eran filosofía. Los estudios sobre el tema parecen indicarnos que no, que la astronomía babilónica tendía a degenerar en astrología, es decir, en arte adivinatoria; y que las matemáticas egipcias, lejos de alcanzar el grado de abstracción necesario para considerarse ciencia, no superaron nunca el estadio de unas matemáticas o de un saber práctico, generado al amparo de las necesidades de medición de los terrenos luego de cada una de las inundaciones periódicas del Nilo.
¿Qué hace que sea en Grecia donde se desarrolle la filosofía y no en cualquier otra zona de oriente? ¿Cómo explicar que, en una civilización concreta, se genere una forma de pensamiento nueva, en contraposición con las anteriores formas de pensamiento? ¿Cuáles son sus características? ¿Y cuáles eran las características del pensamiento anterior? Tanto los orientales como los griegos disponían de una mitología y de unas creencias religiosas similares. Y la estructura explicativa de las mismas es también similar. Un mito es un relato acerca de los orígenes, una narración, no una solución a un problema; puede referirse al origen del mundo, o al origen de un objeto particular, o de una clase específica de animales, etc. Al mismo tiempo que narra, sitúa al hombre en la realidad, le asigna un papel, una función, un sentido, por lo que adquiere también una función social: hacer inteligible el orden social.La existencia de esta forma de pensamiento está atestiguada en todas las civilizaciones, y también, por supuesto, en la griega. De especial importancia para la comprensión de la aparición de la filosofía pueden ser los mitos de Hesíodo que encontramos especialmente en la teogonía. En todo caso, esas explicaciones míticas acerca del origen, comunes a todas las civilizaciones, poseen unas características también comunes que contrastan con las características del pensamiento filosófico: el recurso a entidades sobrenaturales para explicar ese origen, y el recurso a una lógica ambivalente, permitiendo que el mismo elemento o la misma entidad se comporte ya sea como un dios, ya sea como un elemento natural, estarían entre las más significativas. El rechazo de estas características, será propio de la filosofía. Y tal rechazo no parece producirse en la llamada filosofía oriental.

B) La hipótesis del origen griego.

Según esta hipótesis la filosofía sería una creación original del pueblo griego. Nos vamos a centrar en las explicaciones de historiadores del siglo XX, de las que destacamos
La explicación de J. Burnet. Es la llamada tesis del "milagro griego". Según esta hipótesis la filosofía habría aparecido en Grecia de una manera abrupta y radical como fruto de la genialidad del pueblo griego. Esta hipótesis prescinde de los elementos históricos, socioculturales y políticos, por lo que termina por no explicar nada, cayendo en un círculo vicioso: Los griegos crean la filosofía porque son geniales, y son geniales porque crean la filosofía. La mantiene en su obra "La Aurora de la filosofía griega", (1915).
La explicación de F. M. Cornford. Defiende la tesis del desarrollo del pensamiento filosófico a partir del pensamiento mítico y religioso. Según esta hipótesis la filosofía sería el resultado de la evolución de las formas primitivas del pensamiento mítico de la Grecia del siglo VII antes de Cristo. Para Cornford existe "una continuidad real entre la primera especulación racional y las representaciones religiosas que entrañaba" de tal modo que "las maneras de pensar que, en filosofía, logran definiciones claras y afirmaciones explícitas ya estaban implícitas en las irracionales intuiciones de lo mitológico". En su obra "De la religión a la filosofía", (1912), Cornford explica cómo la estructura de los mitos de Hesíodo en la "Teogonía" se mantiene en las teorías de los primeros filósofos, rechazando éstos solamente el recurso a lo sobrenatural y la aceptación de la contradicción. Destaca la influencia educativa de Homero y Hesíodo en la constitución y posterior desarrollo de la civilización griega, y analiza también cómo algunos de los conceptos que serán fundamentales posteriormente en la filosofía, [ moira (hado, destino), diké, (justicia), physis, (naturaleza), ley, dios, alma, etc.] proceden directamente del pensamiento mítico-religioso griego.
La explicación de J. P. Vernant, en su obra "Mito y pensamiento en la Grecia antigua", (1965), añade importantes elementos derivados del contexto sociocultural, político y económico de la época para explicar cómo este paso del mito a la racionalidad fue posible, y por qué se produjo en Grecia en lugar de en otra civilización de la época. La inexistencia de una casta sacerdotal, la figura del sabio, el predominio de la ciudad, la transmisión pública del saber, la libertad individual y el desarrollo de la escritura, hacen posible la puesta en entredicho de las explicaciones cosmológicas y su sustitución por una forma de pensamiento que no entrañe la creencia y la superstición propias de los pensamientos mítico y religioso. La estructura del mito hesiódico (en la "Teogonía") sirve de modelo según Vernant a toda la física Jonia, siguiendo a Cornford. En este mito, en efecto, la realidad se genera a partir de un estado inicial de indistinción, por segregación de parejas de contrarios que interactúan hasta acabar configurando toda la realidad conocida. Existen pues tres momentos fundamentales en el discurrir de la narración:
  • 1) Se parte de un estado de indistinción del elemento originario.
  • 2) De él brotan, por segregación, parejas de contrarios.
  • 3) Conforme a un ciclo siempre renovado se produce una continua interacción de contrarios.

miércoles, 15 de febrero de 2017

BIOGRAFÍA DE SOCRATES

Sócrates fue hijo de una comadrona, Faenarete, y de un escultor, Sofronisco, emparentado con Arístides el Justo. Pocas cosas se conocen con certeza de la biografía de Sócrates, aparte de que participó como soldado de infantería en las batallas de Samos (440), Potidea (432), Delio (424) y Anfípolis (422). Fue amigo de Aritias y de Alcibíades, al que salvó la vida. La mayor parte de cuanto se sabe sobre él procede de tres contemporáneos suyos: el historiador Jenofonte, el comediógrafo Aristófanes y el filósofo Platón. El primero retrató a Sócrates como un sabio absorbido por la idea de identificar el conocimiento y la virtud, pero con una personalidad en la que no faltaban algunos rasgos un tanto vulgares. Aristófanes lo hizo objeto de sus sátiras en una comedia, Las nubes (423), donde se le identifica con los demás sofistas y es caricaturizado como engañoso artista del discurso. Estos dos testimonios matizan la imagen de Sócrates ofrecida por Platón en sus Diálogos, en los que aparece como figura principal, una imagen que no deja de ser en ocasiones excesivamente idealizada, aun cuando se considera que posiblemente sea la más justa.
La filosofía de Sócrates
La cuestión moral del conocimiento del bien estuvo en el centro de las enseñanzas de Sócrates, con lo que imprimió un giro fundamental en la historia de la filosofía griega, al prescindir de las preocupaciones cosmológicas de sus predecesores. Como se ha visto, el primer paso para alcanzar el conocimiento consistía en la aceptación de la propia ignorancia, y en el terreno de sus reflexiones éticas, el conocimiento juega un papel fundamental. Sócrates piensa que el hombre no puede hacer el bien si no lo conoce, es decir, si no posee el concepto del mismo y los criterios que permiten discernirlo.
El ser humano aspira a la felicidad, y hacia ello encamina sus acciones. Sólo una conducta virtuosa, por otra parte, proporciona la felicidad. Y de entre todas las virtudes, la más importante es la sabiduría, que incluye a las restantes. El que posee la sabiduría posee todas las virtudes porque, según Sócrates, nadie obra mal a sabiendas: si, por ejemplo, alguien engaña al prójimo es porque, en su ignorancia, no se da cuenta de que el engaño es un mal. El sabio conoce que la honestidad es un bien, porque los beneficios que le reporta (confianza, reputación, estima, honorabilidad) son muy superiores a los que puede reportarle el engaño (riquezas, poder, un matrimonio conveniente).
El ignorante no se da cuenta de ello: si lo supiese, cultivaría la honestidad y no el engaño. En consecuencia, el hombre sabio es necesariamente virtuoso (pues conocer el bien y practicarlo es, para Sócrates, una misma cosa), y el hombre ignorante es necesariamente vicioso. De esta concepción es preciso destacar que la virtud no es algo innato que surge espontáneamente en ciertos hombres, mientras que otros carecen de ella. Todo lo contrario: puesto que la sabiduría contiene las demás virtudes, la virtud puede aprenderse; mediante el entendimiento podemos alcanzar la sabiduría, y con ella la virtud.Sin embargo, en los Diálogos de Platón resulta difícil distinguir cuál es la parte de lo expuesto que corresponde al Sócrates histórico y cuál pertenece ya a la filosofía de su discípulo. Sócrates no dejó doctrina escrita, ni tampoco se ausentó de Atenas (salvo para servir como soldado), contra la costumbre de no pocos filósofos de la época, y en especial de los sofistas. Si, como parece, las ideas éticas antes expuestas son del propio Sócrates, su filosofía se sitúa en la antípodas del escepticismo y del relativismo moral de los sofistas, pese a lo cual, y a causa de su pericia dialéctica, fue considerado en su tiempo como uno de ellos, tal y como refleja la citada comedia de Aristofánes.
Con su conducta, Sócrates se granjeó enemigos que, en el contexto de inestabilidad en que se hallaba Atenas tras las guerras del Peloponeso, acabaron por considerar que su amistad era peligrosa para aristócratas como sus discípulos Alcibíades o Critias; oficialmente acusado de impiedad y de corromper a la juventud, fue condenado a beber cicuta después de que, en su defensa, hubiera demostrado la inconsistencia de los cargos que se le imputaban.
Según relata Platón en la Apología que dejó de su maestro, Sócrates pudo haber eludido la condena, gracias a los amigos que aún conservaba, pero prefirió acatarla y morir, pues como ciudadano se sentía obligado a cumplir la ley de la ciudad, aunque en algún caso, como el suyo, fuera injusta; peor habría sido la ausencia de ley.